México

México, segunda economía de América Latina, se ha comprometido en la lucha contra el cambio climático, la protección del medio ambiente y la transición energética, con el objetivo de reducir a la mitad sus emisiones de gases de efecto invernadero para 2050. El país apunta a un modelo de crecimiento más justo e inclusivo. Desde 2009, la AFD apoya a México en estos esfuerzos.

Contexto

México es la segunda economía de América Latina. Con más de 120 millones de habitantes, es un país moderno, joven, de economía abierta, en particular frente a su vecino estadounidense. Contando con más del 10% de la biodiversidad mundial, es también uno de los países del planeta con más biodiversidad.

Sin embargo, el rápido crecimiento del país tiene consecuencias preocupantes para el medio ambiente. La flexibilidad del mercado laboral afecta la formalización del trabajo e aleja a una parte de la población de los sistemas de protección social. La violencia y la pobreza afectan a casi la mitad de la población.

Desde 2009, la AFD apoya al país en el desarrollo de una trayectoria hacia bajas emisiones de carbono y resiliente. Acompaña al gobierno nacional y a los estados para construir un desarrollo en beneficio de la población, en particular de los habitantes más vulnerables. Interviene a través de préstamos de política pública, líneas de crédito a los bancos de desarrollo y programas de cooperación técnica.

La agencia de la AFD en México depende de la Dirección Regional México, Cuba y Centroamérica.

Nuestro enfoque

"La AFD y México: prioridad a una trayectoria hacia bajas emisiones de carbono, resiliente e inclusiva"

En México, los financiamientos de la AFD convergen hacia un desarrollo bajo en carbono y resiliente; el 90% de los proyectos tienen co-beneficios climáticos, en materia de mitigación e adaptación. La AFD también apoya a varias secretarías y a las agencias especializadas para establecer e implementar las políticas públicas relacionadas con la lucha contra el cambio climático.

Por ejemplo, apoya a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en la elaboración y el fortalecimiento de medidas legislativas, reglamentarias e institucionales para armonizar los flujos financieros públicos y privados conforme al Acuerdo de París y a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Acompaña a sus socios mexicanos en la implementación del Acuerdo de Escazú, primer tratado medioambiental de América Latina y el Caribe, para reforzar el derecho medioambiental y garantizar el acceso de todos a la justicia en materia medioambiental y climática.

La AFD acompaña también a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos naturales (SEMARNAT) en la preparación de la estrategia nacional de economía circular y ayuda a cinco municipios del Estado de Oaxaca a encontrar soluciones para reducir su vulnerabilidad climática a largo plazo.

México es un país mega-diverso en materia de biodiversidad. Sin embargo, este patrimonio natural está hoy amenazado. La AFD trabaja desde hace 10 años con el gobierno nacional y las autoridades locales para definir modelos innovadores de protección de la biodiversidad. Se han implementado dos préstamos "de política pública" para reforzar la política mexicana de apoyo a las áreas naturales protegidas (Biomex) y apoyar la elaboración de una política nacional en materia de conectividad ecológica (Bioconnect).

Consciente de la importancia y de la fragilidad e de los recursos marinos, la AFD acompaña a México en proyectos pilotos para la protección de la biodiversidad marina y la promoción de la pesca sostenible. También financia, junto con la ONG COBI, un proyecto de innovación azul en la región del Golfo de California.

Por otra parte, en el contexto de una agricultura extensiva que degrada fuertemente los suelos y contribuye a la deforestación, la AFD apoya la emergencia de un modelo agrícola resiliente y solidario, en particular a través de una colaboración estrecha con el banco de desarrollo rural FIRA. La AFD también trabaja con FMCN (Fondo Mexicano para la Conservación) en la financiación de proyectos de "ganadería regenerativa", más sostenibles y económicamente viables, en cuatro Estados de México.

Por último, con recursos del Fondo Francés para el Medio Ambiente Mundial (FFEM por sus siglas en francés), la AFD colabora con la Ciudad de México para la preservación de la zona ecológica de Xochimilco, área declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad en 1987 por su sistema de agrícola único en el mundo y la riqueza de su biodiversidad.

El apoyo a esta transición es un eje fuerte de la acción de la AFD que ha establecido, desde 2011, una asociación privilegiada con la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Se le han otorgado cuatro financiamientos sucesivos para mejorar la eficiencia energética y aumentar el uso de las energías renovables, en particular mediante la modernización del parque de centrales hidroeléctricas.

La AFD también acompañó la implementación de la Reforma Energética del país a través de dos préstamos de políticas públicas a la Secretaría de Energía (SENER), para reducir el costo de la electricidad y la huella de carbono del sector.

La AFD presta especial atención a la inclusión social en los proyectos que financia, con el objetivo de reducir las desigualdades sociales y mejorar la integración del género. También apoya proyectos directamente relacionados con el acceso a la infraestructura y los servicios sociales.

La AFD acompaña así un proyecto de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) que tiene por objeto formalizar y profesionalizar el sector de los servicios a la persona, todavía muy precario en México, y en particular mejorar las condiciones de trabajo de las empleadas domésticas.

También lanzó, con el apoyo de la AP-HP International, un programa de cooperación técnica, destinado a implementar un sistema de gestión sostenible de los hospitales del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS).