Bolivia

El Sistema Interconectado Nacional (SIN) cubre el 94% de la demanda en energía de Bolivia, con una cobertura del 97% en áreas urbanas y 77% en áreas rurales, y las energías renovables (biomasa, solar y eólica) representan solo el 1% de la producción nacional. Con el fin de apoyar el esfuerzo del gobierno boliviano, que busca lograr el acceso universal a la electricidad para 2025 y avanzar hacia un suministro eléctrico seguro, sostenible y de bajo costo para la población, la AFD apoya a Bolivia a través de:

• un préstamo para la construcción de una de las primeras plantas solares fotovoltaicas en el departamento de Oruro;
• un préstamo para la construcción de dos parques eólicos en los departamentos de Santa Cruz y Tarija;
• un apoyo presupuestario para apoyar la política pública de transición energética del país;
• un programa de cooperación técnica, a través de fondos delegados de la Unión Europea y de fondos no reembolsables movilizados por la AFD, para fortalecer las competencias nacionales en el sector, apoyar la normativa ambiental y social, integrar las energías intermitentes en el SIN (con el Comité Nacional de Despacho de Carga CNDC y su par francés, RTEi), implementar un sistema de información energética, impulsar la electromovilidad, fortalecer la igualdad de género en el sector.

En Bolivia, la tasa de acceso a los servicios de saneamiento es del 57% y el desempeño de los servicios de distribución de agua potable y saneamiento es aún precario. La calidad del agua es un problema real, tanto para la población como para el medio ambiente. La AFD se comprometió a ayudar al gobierno boliviano mediante:

• un préstamo para la construcción de una aducción de agua potable de 27,5 km, que transportará agua desde la represa Misicuni al área metropolitana de Cochabamba;
• un préstamo para la construcción de plantas de tratamiento y redes sanitarias asociadas en Cochabamba, para el saneamiento del Río Rocha;
• un apoyo presupuestario en el sector del agua para fortalecer el marco sectorial a largo plazo, incluyendo el fortalecimiento institucional de varias EPSA en el país;
• un programa de cooperaciones técnicas para apoyar al Ministerio de Medio Ambiente y Agua y dos cuencas pilotos en la gestión integral del agua (en alianza con la Oficina Internacional del Agua OiEau), y fortalecer a la Empresa Misicuni;
• la producción de conocimientos mediante un programa de investigación sobre los bienes comunes del agua en Bolivia.

En un contexto global frágil, más aún después de la pandemia del Covid-19, Bolivia se enfrenta a desafíos de consolidación de su economía. En este marco, el país ha adoptado medidas de reactivación económica basadas en el fortalecimiento de su tejido productivo.
El Grupo AFD está apoyando esta dinámica, mediante:

• un apoyo presupuestario de urgencia cofinanciado con otros donantes durante la pandemia para financiar bonos sociales dirigidos a las poblaciones más vulnerables del país;
• un préstamo al Estado boliviano para apoyar la reactivación sostenible y resiliente al cambio climático a través de tres ejes:
  • la estabilidad macroeconómica. Por ejemplo, se está adaptando el modelo GEMMES de la AFD, para integrar el clima en las políticas públicas del país (Facilidad 2050 de la AFD);
  • la implementación de los compromisos bolivianos establecidos en sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas a 2030. Por ejemplo, se acompañará el diseño de la estrategia nacional de mitigación y la gestión integral de los bosques en Bolivia (fondos Euroclima+);
  • la transición justa, a través de la consolidación de la estrategia financiera verde del Banco de Desarrollo Productivo (BDP).
• dos operaciones de crédito de Proparco para apoyar el financiamiento de la Pequeña y Mediana Empresa y de la Microfinanza (Banco Ganadero y Cooperativa San Martin de Porres (COSMART)).

Bolivia también forma parte de los beneficiarios de varios proyectos regionales financiados por el Grupo AFD:

• la AFD ha financiado a alianzas entre OSC bolivianas y francesas en temas de desarrollo rural y agrícola, derechos humanos, salud y empoderamiento económico de las mujeres;
• el desarrollo urbano se está abordando desde diferentes ángulos: un proyecto de movilidad urbana sostenible con la construcción de una ciclovía piloto en la ciudad de La Paz (fondos Euroclima+), un estudio sobre diferentes modalidades de financiamiento de entidades territoriales (Ciudad Confianza), y estudios de vulnerabilidad climática en las ciudades de Tarija y La Paz, realizados por el IRD y otras instituciones;
• Expertise France por su parte, implementa varios proyectos regionales sobre bosques y biodiversidad en la Amazonia, la Chiquitania y el Chaco (fondos Euroclima+), pero también sobre protección social y políticas públicas para hacer frente al envejecimiento de la población;
• Bolivia forma parte del proyecto regional de apoyo a la implementación del Acuerdo de Escazú, donde además participan Ecuador, México y Costa Rica.